Vinieron un montón de niños y niñas, con mamás, algún papá y alguna abuela. Y por supuesto, el club de lectura Divertilibros que no quiso perderse la oportunidad de preguntarme cosas sobre Amina después de haber leído el libro en el club de la biblioteca.
Laura Arnal fue la encargada de presentarme y de organizar a esta pequeña troupe.
Hablamos de por qué escribí Amina, de las ilustraciones de Blanca Bk y de qué conjuros les gustaría hacer a los niños. Ganaron por goleada los conjuros para convertir la verdura en otra cosa o conseguir que el perro se la coma sin que nadie se entere. No estaría mal, ¿verdad?
Al final los niños del club Divertilibros salieron a leer un trocito cada uno de Amina. Aquí os dejo algunas fotos con los lectores. Por cierto, ¡leían muy bien! Genial el trabajo de Virginia dinamizando y consiguiendo que los niños se animen a leer y leer.
Os dejo aqui el enlace con la noticia que se público en el Diario del Altoaragón.
Sandra
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